Siete

¿Sabes esa sensación en la que sientes que has cambiado de etapa? Que las cosas son diferentes. Sientes diferente. Te intentas adaptar al cambio. Te cuesta. Porque es un lugar en el que no has estado antes. Pero te gusta. Esos cambios los estás provocando tú. El esfuerzo está dando sus frutos. Sigues intentándolo. Y cuando lo consigues, cuando te adaptas, empiezas a percibir señales. Inicias la siguiente etapa.

Una mañana, escuchando tu playlist favorita y viendo la ciudad amanecer desde la ventanilla del coche, te das cuenta de que ya no estás donde estabas antes. No tienes las mismas preocupaciones. Y sonríes. Comprendes que esto es una señal. Es como si de repente todo cobrara sentido. Por fin eres quien necesitas.

En esa nueva etapa, vas encontrándote personas. Sientes que llevabas toda la vida esperándolas. Y ojalá poder seguir conociéndolas toda la vida. Ojalá 7 vidas.

Es mediodía, césped, sol y la mejor compañía. Cierras los ojos. Deseas quedarte allí una eternidad. Esa es otra señal. La eternidad no implica que algo dure para siempre. La sensación de vivir en un presente pleno, de estar dónde, cómo y con quién queremos. Eso es la eternidad. All we have is now :)

Pensabas que quedarte con ganas de más era malo. Pero poco a poco, entiendes que el secreto está ahí. Que la siguiente vez solo puede pasar si quieres más. Si sabes que puedes dar más. Señales en cada conversación, en cada entrenamiento, en cada momento.

Un lunes que es menos lunes porque sabes que los vas a ver.

Los martes empiezan tus momentos favoritos de la semana.

Los miércoles descubres en la cafetería miradas conocidas, cercanas, familiares. De ojos que de verdad miran, que se iluminan al escuchar un chiste, risas sinceras, entrañables.

Un jueves cualquiera vas a las ferias. Estás en lo más alto de una atracción. Miras a lo lejos. Ves luces borrosas, pero por fin lo ves todo claro. Se para el tiempo. Ahora miras a tu alrededor. Estás con quien quieres. Esa sensación te saca de la rutina. Puras endorfinas.

Un viernes en el que volver de clase hablando con amigas y dando un paseo es un planazo.

El sábado y el domingo son días de desconexión. Reflexionas. Te sientes afortunada y agradecida, por estar rodeada de gente que te hace crecer. Para seguir creciendo juntos. Para que todo sean señales.

Siete personas. Siete días. Siete vidas.

<3